viernes, 29 de enero de 2010

Esto sin nombre alguna vez...


Porque esto sin nombre alguna vez
ha tomado el nombre de febrero.


Porque ha crecido tanto en tantos seres

que ya no es posible la fragancia de abril.



Porque distante y cercana es necesario

dejarte a la vuelta del silencio.



Porque en este recodo del frío

no encontraremos más que peces congelados

y alguna íntima intención de eternidad

en cada beso.



Y porque en este invierno que se cierra

sobre nuestras almas apretadas

apiñando melancolías a la derecha de los ojos,

habita ese otro enorme abrazo

que nos renueva el corazón en cada sombra,

en cada caricia,

en cada sosiego...


te amo



--

No hay comentarios:

Publicar un comentario