miércoles, 10 de febrero de 2010

Te recuerdo como te imagino...


Te recuerdo como te imagino,


te sueño como te deseo:


una voz amarilla en mi alma


dice en silencio "te quiero".



Te extraño hora tras hora


(y jamás he tocado tu pelo):


¿cómo puede mi nostalgia


deshilarse en estos versos?



En la noche de mi almohada


se desgranan mis anhelos:


estás prendida a mis horas


como una estrella en los cielos.



Me sé tu nombre lejano,


me sé todos tus acentos:


en los jirones del aire


cabe tu nombre completo.



Si no conozco tu piel


ni tu rostro entre mis dedos:


¿cómo es posible entonces


quererte como te quiero?



Conozco tu voz exacta,


tu risa azul en el viento:


el sonido de tus pasos


se mezcla con mi silencio.



Te recuerdo como te imagino,


entre septiembre y febrero:


hay canciones que te nombran


muy adentro de mi pecho.



Sé que habitas un rincón


amarillo de mis huesos:


te llevaré en mi nostalgia


hasta el final de los tiempos.




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martes, 9 de febrero de 2010

Era otoño en París...


Era otoño en París, tras la lluvia

vi a una diosa gentil que eras tú,

una flor de marfil que humedecía

las baldosas de la Ciudad Luz.


Era otoño y en el mapa de la niebla

me topé con una estatua que eras tú,

era otoño en la ruta de los sueños:

Pernambuco, Macedonia, Timbuctú...


Era otoño, y en el mar de la nostalgia

imaginé una sirena que eras tú,

que en la bruma amarilla de la angustia

puso rumbo hacia la Cruz del Sur.


Era otoño, y en un país antiguo

encontré una esfinge que eras tú,

en sus ojos de arena como espuma

se reflejaba la luna del Perú.


Era otoño en París, bajo la lluvia,

encontré una estatua que eras tú,

que emanaba una fragancia transparente

en todos los rincones de la luz.


Era otoño, y en los rincones de mi alma

encontré las ruinas de una cruz

que una vez fue estatua, esfinge, sirena,

diosa, nostalgia, maravilla... tú...



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lunes, 8 de febrero de 2010

Soy de los que morirán a solas...


Yo soy de los hombres que morirán solos

tasajeando el aire el sol la esperanza

alimentando la borrasca del olvido,

enamorado febril de los naufragios



Yo soy de los que morirán a solas

como perro en los portales del invierno

sin hijos sin mujer y sin hermanos

sólo una camisa sucia y vieja

colgada en la percha de la vida



Yo soy de los hombres que han de morir a solas

borracho insomne y de agonía

carcomiendo el último crepúsculo

en la jugada final de este suicidio




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domingo, 7 de febrero de 2010

Construyendo tu recuerdo...


estar aquí frente a ti

simple y llanamente

sólo hombre solo

despellejando mariposas azules

tristes mariposas de la tristeza

para ocupar tus ojos

para tintinear en tus labios

esta cobarde canción de amor

este beso que se deshila tarde a tarde

sueño a sueño llanto a llanto.


estar aquí

batallando con estas palabras del pasado

que no dicen nada

construyendo tu recuerdo

para cada madrugada

rescatando de los muros de ayer

tus fotos y tus gemidos

los ‘te quiero’ sudorosas

el estertor bajo la sábana

y tu rostro entre la lluvia


estar aquí frente a ti

mirándote como se mira el mar

profundamente enigmático

secreto y salado como tú

compañera que fuiste

fantasmas que habitas

olvido de mañana



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sábado, 6 de febrero de 2010

La cintura amable de tus palabras...

Cómo será aspirar el olor de tu cuerpo,
atrapar tu voz al vuelo,

sostenerla por la cintura amable de tus palabras,

amasarla suave, lento, seguro entre los dedos

y hacerla ese fantasma necesario

para la media noche más oscura del alma,

niña de las tardes...?


Cómo será ir por la vida siguiéndote las huellas,

otear los lugares donde has estado desde siempre,

deshojar la margarita de los días,

deshacer en tu boca uno a uno los viejos anhelos

de volver a nacer a cada instante

en una piel dispuesta a la ternura...?


Cómo será vivir prendido en tu memoria,

incrustado en tus sueños más profundos,

dibujando tus ojos pequeños y luminosos,

tu cuerpo de brisa marina,

tu cabello de hilos nocturnos,

tus manos de cosas simples,

tu nombre ignorado por el mundo,

tu rostro limpio y bello,

tu andar descalzo por la arena de las tardes,

tu llegar de la nada,

tu suave irrumpir a la luz de los días

para sembrar de tu voz breve

el silencio de la oscuridad que me persigue

desde siempre...?


Cómo será,

a quién preguntar,

con quién soñar que no seas tú,

pequeña paloma de las tardes,

para no seguir amaneciendo

en este mar de gaviotas tristes

que es este ir y venir por los días mortales

de este invierno oscuro y silencioso,

niña dormida en mis versos...?


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viernes, 5 de febrero de 2010

Tan pequeña, tan bonita, tan delgada...


ella era tan pequeña tan bonita tan delgada

que cabía por el ojo de mi ojo

y por el sombrío tintinear de la ventana


ella era tan estrella tan paloma tan palabra

que alteraba al parpadeo del silencio

y volaba por las nubes de mi alma


y ella al fin se esfumó como la niebla

en un trozo de esperanza desgarrada

deshilando su cuerpo y su recuerdo

en la cuchilla feroz de la nostalgia



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jueves, 4 de febrero de 2010

Los hombres mueren solos...


veo mariposas cuando pienso en ti

veo mariposas y espuma de huesos

y desolación en el fondo de la almohada



los hombres mueren solos en su cama

ensangrentados de amor insatisfecho

y gemidos de placer cortados de tajo



así muero yo

con el rostro lleno de una sonrisa sin sonrisa

que se marchita bajo la sábana

en una soledad punzante

como tormento medieval



así muero yo

como una rueda que gira en la noche

tejiendo y destejiendo las calles de la agonía



los hombres mueren solos en su cama

con una enorme hendidura en el pecho

a la altura del corazón y el desaliento

como infinita bondad de mariposas

que sorben la espuma de los huesos

hasta dejar la aridez con la mañana



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